carteles rotulacion elche |
Al igual que en tipografía, la plancha es de lectura negativa y, al ser flexible, para que la plancha quede bien ajustada, la colocación en el cilindro portaplancha implica una cierta deformación de la plancha, lo que debe ser tenido en cuenta al crearla (hay fórmulas y programas para calcular y corregir esa deformación) .
Las planchas tradicionales eran de algún tipo de goma.
En la actualidad la mayoría son de algún tipo de fotopolímero (materiales flexibles de tipo plástico sensibles a la luz) .
Estas planchas son más duraderas y permiten acabados con mayor detalle.
Las tintas
Las tintas de flexografía son no grasas (su base es alcohólica o acuosa) .
Tienen poca viscosidad y secan muy rápido (por eso es un proceso de impresión muy ágil) .
Son translúcidas: No son opacas y cuando imprimimos una tinta encima de otra, los colores se suman, no se tapan (mezcla de colores sustractiva: los pigmentos sustraen luz) .
Los sistemas más tradicionales de flexografía tenían depósitos de tinta abiertos, lo que hacía que se produjeran pérdidas y deshechos por su evaporación.
Los sistemas dispensadores de tinta mediante cámaras cerradas (enclosed chambered systems) han sido un gran avance.
Los sustratos
Debido a la adaptabilidad de sus planchas y al rápido secado de sus tintas, la flexografía admite muchos tipos de sustrato siempre ha destacado en la impresión de envases con materiales de superficies desiguales: Cartón corrugado, tetrabriks y envases de alimentos, bolsas, etiquetas, etc…
La mejora de calidad del sistema ha permitido incluso la tímida entrada de la flexografía en mercados editoriales de bajo coste (prensa popular y libros de bolsillo) .
Incluso hoy día no es raro encontrar sistemas flexográficos
Una vez en marcha, una cámara cerrada (5) proporciona tinta a un cilindro anilox (2) .
Una rasqueta (6) extremadamente precisa, elimina el sobrante de tinta del cilindro e impide que la tinta escape de la cámara.
Al girar, el cilindro anilox entra a su vez en contacto directo con la plancha y le proporciona tinta en las zonas de relieve.
Las zonas más bajas quedan secas.
El uso del cilindro anilox es esencial para distribuir la tinta de forma uniforme y continuada sobre la plancha.
La plancha, ya entintada, sigue girando y entra en suave contacto directo con el sustrato (que puede ser papel, cartón o algún tipo de celofán) .
El cilindro de impresión (7) sirve para mantener el sustrato en posición.
El sustrato recibe la imagen de tinta de la plancha y sale ya impreso (8) , secándose de forma muy rápida.
Ese proceso imprime un color.
Cada sistema de cilindros/plancha/mojado/entintado es un cuerpo de rotativa capaz de imprimir un color.
Para imprimir cuatro colores hacen falta cuatro cuerpos, aunque las variantes y posibilidades son muy numerosas.
Planchas, tintas y sustratos para flexografía
Las planchas
Las planchas flexibles, se adaptan fácilmente a superficies razonablemente desiguales, por lo que se puede imprimir en materiales como cartón corrugado y otro tipo de embalajes sin aplicar mucha presión (kiss printing) .
las características del sustrato imprimible y de las planchas hacen que la flexografía no sea un proceso de impresión de precisión similar al huecograbado o la litografía offset.
Aunque es un sistema relativamente simple, para mantener un nivel de calidad elevado hay debe mantenerse un estricto control, si no el color puede ser muy desigual y la impresión puede tener halos o zonas desiguales.
La velocidad del sistema y el rápido secado ayudan a que los reventados trapping) del proceso sean menores de lo que la falta de detalle del sustrato y la plancha podrían necesitar.
Las características de la plancha y los sustratos hacen que las lineaturas y tamaños mínimos de tipografía reproducibles sean más limitados que en procesos como el offset o el huecograbado.
El coste de las planchas es mayor que en litografía offse, pero las planchas aguantan tiradas bastante largas y son mucho más baratas que las de huecograbado.
Los sistemas mecánicos y las mezclas de fluidos son más simples que los de offset, por lo que son más fáciles de mantener.
En diseño gráfico y preimpresión, nada produce mayores problemas que los trabajos mal preparados, incompletos o con especificaciones erróneas.
Por eso antes de enviar el trabajo definitivo la fotomecánica o imprenta es imprescindible hacer una serie de comprobaciones finales.
Este examen es similar al chequeo (preflight check) que hacen los pilotos de aviación antes de partir en vuelo (combustible: ok, frenos: ok, escotillas: ok…) .
De ahí que escuches muchas veces la expresión preflight para referirse a él (si quieres quedar 'bien' puedes pronunciarlo algo así como pre-fláit) .
En artes gráficas consiste básicamente en comprobar que va todo lo que debe ir, que los parámetros son correctos y que nada de lo que no debe ir se va fuera.
Así de simple.
Trabajar con un sistema de trabajo (workflow) adecuado y bien planteado evita muchas comprobaciones posteriores y garantiza que este preflight sea una operación sencilla y rutinaria.
Puedes usar herramientas (como FlightCheck de Markzware) o establecer estándares de trabajo (como las distintas variantes de PDF/X) , pero lo primero es adquirir una disciplina de trabajo bien fundada.
Para que sea más fácil, rápido y sencillo entregar trabajos listos para imprenta a tiempo.
Eso distingue en buena parte a los aficionados de los profesionales.
Si tienes dudas, asiste a una conversación de preimpresores e impresores contando anécdotas sobre diseñadores.
Lo entenderás enseguida: El 90% tiene que ver con trabajos mal entregados.
Dependiendo del tipo de trabajo que se va a entregar, los puntos del examen variarán.
Lo que viene a continuación es un listado de comprobaciones usuales.
He intentado distinguir lo imprescindible (obligatorio) de lo opcional (conveniente) .
Algunas cosas faltarán y algunas sobrarán.
Al igual que en tipografía, la plancha es de lectura negativa y, al ser flexible, para que la plancha quede bien ajustada, la colocación en el cilindro portaplancha implica una cierta deformación de la plancha, lo que debe ser tenido en cuenta al crearla (hay fórmulas y programas para calcular y corregir esa deformación) .
Las planchas tradicionales eran de algún tipo de goma.
En la actualidad la mayoría son de algún tipo de fotopolímero (materiales flexibles de tipo plástico sensibles a la luz) .
Estas planchas son más duraderas y permiten acabados con mayor detalle.
Las tintas
Las tintas de flexografía son no grasas (su base es alcohólica o acuosa) .
Tienen poca viscosidad y secan muy rápido (por eso es un proceso de impresión muy ágil) .
Son translúcidas: No son opacas y cuando imprimimos una tinta encima de otra, los colores se suman, no se tapan (mezcla de colores sustractiva: los pigmentos sustraen luz) .
Los sistemas más tradicionales de flexografía tenían depósitos de tinta abiertos, lo que hacía que se produjeran pérdidas y deshechos por su evaporación.
Los sistemas dispensadores de tinta mediante cámaras cerradas (enclosed chambered systems) han sido un gran avance.
Los sustratos
Debido a la adaptabilidad de sus planchas y al rápido secado de sus tintas, la flexografía admite muchos tipos de sustrato siempre ha destacado en la impresión de envases con materiales de superficies desiguales: Cartón corrugado, tetrabriks y envases de alimentos, bolsas, etiquetas, etc…
La mejora de calidad del sistema ha permitido incluso la tímida entrada de la flexografía en mercados editoriales de bajo coste (prensa popular y libros de bolsillo) .
Incluso hoy día no es raro encontrar sistemas flexográficos